Los dientes de los niños ya están al nacer, aunque no se vean.
Otra de la curiosidades sobre los dientes de los niños que pocos padres saben es que los elementos ya están dentro de la mandíbula cuando el pequeño nace. Luego tendrán un proceso de erupción escalonado.
De hecho, hay bebés que nacen con alguno ya erupcionado y a esos se los conoce como dientes natales. La frecuencia de este fenómeno es de 1 en cada 2000 nacimientos, aproximadamente.
Estos dientes natales tienden a localizarse en la región inferior. A veces, si el odontólogo lo considera oportuno, sugerirá la extracción, de manera que no se dificulte la lactancia materna y que no haya riesgo de aspiración del elemento por accidente.
Como bien adelantamos, en la mayoría de los casos los bebés nacen sin dientes y siguen un proceso de erupción que tiene el siguiente cronograma:
- Dos incisivos inferiores: son los primeros en salir, entre los 6 y los 10 meses de vida del niño.
- Dos incisivos superiores: aparecen entre los 8-12 meses.
- Incisivos laterales superiores e inferiores: se completan entre los 9 y los 16 meses de vida.
- Primeros molares superiores e inferiores: antes que los caninos, los primero molares hacen su aparición en la superficie de las encías entre el año y el año y medio desde el nacimiento.
- Caninos: los caninos superiores se asoman entre los 16 y los 22 meses, mientras que los inferiores lo hacen cerca de los 2 años.
- Segundos molares inferiores y superiores: los últimos dientes de leche que completan la dentición decidua lo hacen entre los 2 y los 3 años.
Estas fechas son orientativas, pero cada niño tiene su propio ritmo de crecimiento y desarrollo. Si bien sirven estos datos para tener parámetros de normalidad, es importante saber que puede haber retrasos que no significan la existencia de una patología.